Con la llegada del otoño comienza el descenso de temperaturas y el incremento de humedad. Es aquí cuando debemos empezar a tratar especialmente nuestra piel con el fin de que se fortalezca y revitalice para afrontar el invierno. Aunque me cuido durante todo el año, en verano las exposiciones al sol, aún con protección, hacen que mi piel quede un poquito tirante y deshidratada. Llegada esta época del año es cuando suelo hacerle una cura a mi piel, en primer lugar para recuperarla y en segundo para prepararla para el invierno. En invierno no solo nos enfrentamos a la bajada de temperaturas sino a cambios bruscos de la misma (entrada y salida de lugares con calefacción y temperaturas altas, a las bajas temperaturas de la calle) y a calefacciones. Todo esto y aunque muchas no lo creamos, afecta desmesuradamente a la salud de nuestra piel provocando que esta se reseque. Aquí sufren todos los tipos de piel, las secas evidentemente más pero así mismo lo padecen las mixtas o grasas. En mi caso mi piel es mixta. Recordad también que a causa del frío las venitas y capilares se contraen provocando un descenso de la circulación y como consecuencia un descenso del aporte de oxigeno y nutrientes a nuestra piel.
A continuación os dejo con los tips que yo suelo poner en práctica para mitigar todos estos problemillas y prepararla para el invierno.
- Lo primero que hago es limpiar bien mi piel. Yo no uso leche limpiadora, no me gusta como me deja la piel. Suelo usar algún gel fresquito o mousse limpiador.
- A continuación realizo una exfoliación. Para ello utilizo una exfoliante con el granito más denso y grueso que la que suelo usar semanalmente.
- Aplicar una mascarilla natural compuesta por una mezcla homogénea de: Pulpa de Aloe vera, miel y aceite de oliva. Dejar actuar de 15 a 20 minutos y enjuagar con agua muy fría.
- Seguidamente aplico un serum con vitamina C. La vitamina C es muy importante para la elasticidad de nuestra piel y además favorece la formación de colágeno. Comentaros que además procuro tomar a diario vitamina c mediante la ingesta de un zumo natural de naranja en la mañana.
- Una vez absorbido el serum procedo a hidratar mi piel. Para ello añado a mi hidratante habitual media capsula de vitamina E. Las cápsulas de vitamina E las podéis adquirir en la farmacia. La vitamina E ayuda a regenerar mi piel.
El mejor momento para realizar el tratamiento es la tarde-noche ya que lo ideal sería no aplicar nada de maquillaje después de realizarlo. El tratamiento lo realizo durante tres días, dejando entre día y día dos días en blanco. Un ejemplo: lunes-jueves-domingo.
Transcurridos estos tres días de tratamiento mi piel estará recuperada y preparada para afrontar el invierno. A partir de entonces continúo a diario con mi rutina básica de cuidado habitual.
Por último algo muy importante para el aspecto de la piel, no dejar de sonreír.
6 comentarios
Que genial!!!! Me encanta, tengo una preciosa planta de Aloe en la terraza, voy a cortarle una penca y haré la mascarilla.
Gracias por tus trucos. Fantásticos. Y eso sí, no dejar de sonreir…
Muchos besitos preciosa!!!
Lola que buenos consejos, la mascarilla con aloe vera me ha gustado, yo tengo la piel sensible y siempre estoy probando métodos naturales, coincido contigo soreir es una buena terapia para la piel, besos ana.
geniales tips.
Nice blog dear.
xo.
From hats to heels
http://www.fromhatstoheels.com
Me parece muy buen tratamiento. Pero lo mejor es sonreir.
Besos guapa
Qué buenos consejos :), en estos lados del mundo ya empezó la primavera pero los tendré en cuenta para la proxima temporada 🙂
Saludos!